Las habitaciones son cómodas y bien equipadas.

El acceso al hotel es complicado, pues se encuentra en una entrada lateral poco visible. Además, no tiene acceso a la playa, lo cual fue una gran decepción ya que esperaba disfrutar del mar sin tener que trasladarme. Finalmente, el tipo de cambio aplicado al momento del check-out fue mucho más alto que el del mercado, lo que resultó en un cargo inesperado que me dejó insatisfecho.

experiencia memorable aunque con algunos detalles que mejorar

El desayuno fue una delicia, especialmente los chilaquiles que preparan con gran atención y sabor. La atención del personal es excepcional, se notaba la dedicación en cada interacción, haciendo que me sintiera como en casa. Además, la vista al mar desde mi habitación fue impresionante. el amanecer era un espectáculo diario.

El acceso al hotel es un poco confuso y no tiene acceso directo a la playa.

Una experiencia inolvidable en Cancún

Disfruté de una cómoda habitación con ducha de lluvia. El desayuno espectacular y el gimnasio bien equipado me mantuvieron activo. Un consejo, no olviden preguntar por el acceso al hielo y reserven poco antes de las horas pico del desayuno. ¡Excelente ubicación!

Todo muy bien, especialmente el personal amable.

la entrada al hotel es un caos, además de que el olor a humedad en la planta 11 es irrespirable. Tardaron siglos en darme la habitación que había reservado con antelación, y por si fuera poco, no obtuve ningún tipo de deferencia especial por mis molestias, ni siquiera una carta de disculpas. lamentable! casi veo lo bueno, pero no pude.

la cama es increíblemente cómoda y el desayuno sorprendente! !

desayuno delicioso, instalaciones impecables

personal poco atento

La atención del personal es excepcional, siempre dispuestos a ayudar. Las habitaciones son cómodas y cuentan con buenas vistas. El desayuno bufet es muy variado y delicioso, especialmente los platillos internacionales. Sin embargo, el acceso al hotel es algo confuso y no hay acceso directo a la playa, lo que puede ser un inconveniente. Además, el gimnasio es moderno, pero a veces estaba abarrotado y eso dificultaba el entrenamiento.

La atención del personal fue realmente excepcional, pero

hubo problemas con el servicio durante la noche que hicieron que algunas solicitudes no se procesaran. La habitación tenía una vista hermosa a la marina y el desayuno fue delicioso, aunque a veces el buffet estaba abarrotado.

el personal es increíblemente amable y profesional. la piscina es pequeña.

Las habitaciones son elegantes y cuentan con un servicio a la habitación excelente. La alberca es tranquila y perfecta para relajarse. Además, la amabilidad del personal hace que la experiencia sea aún mejor.

El acceso al hotel podría ser confuso para algunos, ya que la entrada es lateral y no muy visible.

Tuve un buen tiempo explorando el menú del desayuno. Los chilaquiles fueron un gran hallazgo, deliciosos y con un personal que siempre estaba atento y amable. Me sentí como en casa con sus cortesías. Aunque el acceso a la playa no es directo, el ambiente y las vistas compensan. Viajar solo me dio la oportunidad de disfrutar de cada instante.

La entrada al hotel es un poco extraña y no tiene acceso directo a la playa.

El personal es increíblemente amable y siempre dispuesto a ayudar. La vista desde mi habitación a la marina era simplemente espectacular, y la ubicación junto al centro comercial lo hace súper práctico.

No tengo ni una sola queja.

Disfruté de una cama súper cómoda y un desayuno impresionante. Todo estaba impecable. Definitivamente volvería aquí en mi próximo viaje.

Disfruté de una experiencia única en un hotel con un diseño inspirado en la cultura maya y vistas impresionantes. El desayuno en Kaajal fue un verdadero deleite, con platos internacionales que sorprendieron mi paladar. Además, el acceso a la playa privada de Puerto Cancún y a múltiples piscinas me permitió relajarme a fondo.

Acceso confuso.